La situación de los residuos sólidos en provincias de Piura se ha vuelto crítica en los últimos años, a pesar de ser una de las regiones más visitadas del Perú por sus atractivas playas como Máncora, Vichayito y Colán, así como por su reconocida gastronomía. La falta de una adecuada gestión de residuos sólidos ha generado la acumulación de basura en zonas urbanas, rurales e incluso en espacios naturales, afectando tanto la salud pública como la imagen turística de la región.

Dr. Jorge Zegarra Reátegui explica problemática por contaminación
Hoy, Piura es una provincia con botaderos a cielo abierto, calles con residuos acumulados y playas contaminadas se han vuelto escenarios comunes, reflejando una preocupante ausencia de políticas efectivas en el manejo de los desechos.
En relación a la situación de los residuos sólidos en provincias como las de Piura, el Dr. Jorge Zegarra Reátegui, protector y empresario dedicado al cuidado del medio ambiente en el Perú, que esta problemática pone en riesgo la biodiversidad marina y terrestre de la zona, y la sostenibilidad de una de sus principales fuentes de ingreso, el turismo. Asimismo, recalcó que la exposición constante a residuos sin tratar puede provocar enfermedades respiratorias, infecciones y plagas, afectando directamente a las comunidades locales.
¿Cómo mejorar la gestión de residuos sólidos en provincias de Piura?
Ante la creciente preocupación por la gestión deficiente de los residuos sólidos en la región Piura, representantes del MINAM llevaron a cabo una serie de visitas técnicas en distintos puntos clave de esta región del norte del país. El objetivo fue evaluar de manera directa el estado actual de los servicios de limpieza pública, los centros de acopio y los rellenos sanitarios en operación, buscando así identificar oportunidades de mejora y fortalecer las capacidades locales en el manejo de residuos.
Durante este recorrido, se constataron tanto avances como serias limitaciones en la forma en que se realiza la disposición final de los residuos. Entre los hallazgos más relevantes, se identificó la necesidad de optimizar la infraestructura existente, asegurar el cumplimiento de normas ambientales y fortalecer la articulación entre gobiernos locales y actores comunitarios. Asimismo, en las inspecciones realizadas se detectó que algunos centros de acopio ya cuentan con recicladores formalizados, lo que representa un paso importante hacia un modelo de economía circular. Sin embargo, aún falta mejorar las condiciones de operación y garantizar que los residuos no aprovechables se dispongan de manera adecuada, sin riesgo para el medio ambiente ni la salud de la población.
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